La yoga de flujo matutino es una secuencia estructurada de movimientos fluidos y conectados, que buscan despertar gradualmente el cuerpo y activar la respiración. La práctica transcurre a un ritmo que permite el calentamiento natural de los músculos, la movilización de las articulaciones y un aumento suave de la energía. Combina estiramiento, fuerza moderada y coordinación, con énfasis en la transición dinámica de una postura a otra y la sincronización con la respiración.